In the middle of the twentieth century, the invention and availability of new psychedelic drugs, and the growing cultural discourse around them, coincided with those of television, videotape, and computing. The technologies of psychedelics and electronics grew up together, and those using or thinking about one often implicated the other. When Sony and other Japanese manufacturers developed new portable videotape recorders in the late 1960s, for example, new communities of artists and tinkerers emerged around them, first in the US and Canada and then in Europe, Asia, North Africa, and Latin America. For the first time, declared these enthusiasts, many people could make their own television, breaking the broadcast oligopoly. In describing the psychological and sociological implications of this new technology, many compared it to psychedelic drugs.
A mediados del siglo XX, la invención y disponibilidad de nuevas drogas psicodélicas, y el creciente discurso cultural en torno a ellas, coincidieron con los de la televisión, las cintas de vídeo y la informática. Las tecnologías psicodélicas y la electrónica crecieron juntas, y quienes usaban o pensaban en una a menudo implicaban a la otra. Cuando Sony y otros fabricantes japoneses desarrollaron nuevos magnetoscopios portátiles a finales de los años sesenta, por ejemplo, surgieron nuevas comunidades de artistas a su alrededor, primero en Estados Unidos y Canadá, y después en Europa, Asia, el norte de África y América Latina. Por primera vez, declararon estos entusiastas, mucha gente podía hacer su propia televisión, rompiendo el oligopolio de la radiodifusión.